...¿Hasta donde somos dueños de nuestras vidas? ¿Dirigimos la vida por donde queremos o es la propia vida la que nos dirige por donde ella quiere?...

A ti, A ella, por sobre las estrellas...

...Llora la noche, una vez más, su llanto de recuerdos...

Todo a mi alrededor, sin tu luz, son sombras, sombras y nada más que eso...

Sombras que se agigantan lentamente a medida que pienso en esta soledad y sus raíces;
Sombras que me envuelven, me lastiman;

Sombras que, ignorando lo que para mí tu presencia, avanzan creyendose dueñas de tu espacio...


Cierro mis ojos... Permito que el extraño murmullo de la lluvia en mi balcón me transporte directamente a un sueño tibio, recurrente, donde tu partida no existe y todo vuelve a brillar...

Finalmente, este tedioso cansancio me vence y me duermo, abrazada a tu recuerdo, y entonces, la rutina de tu ausencia, me transporta a un sueño, a un sueño tibio, recurrente, donde tu partida no existe y todo vuelve a brillar...


...Y subió hasta el cielo, lloró el amanecer. Un angel para el cielo ha de ser...